Jóvenes para Cristo

De nuevo hacemos un alto en nuestro hacer y nos disponemos para pedir al Padre que mueva el
corazón de quienes están siendo llamados a una mayor entrega en favor de los hermanos.

Se necesitan jóvenes que se atrevan a mucho.
Que les importe su vida.
Que no teman al "que dirán".
Que se empeñen en ser felices y en hacer felices a los demás.
Que sepan elegir lo mejor.
Que digan siempre SI, a todo lo noble, a todo lo bello, a todo lo bueno.

Hace falta generosidad por nuestra parte.
Examinemos nuestra generosidad y pidamos perdón no solo a Dios, también a la Iglesia, por las
veces que nos hemos desentendido de su llamada.

ORACIÓN

Oh Dios,
que quisiste dar pastores a tu pueblo,
derrama sobre tu Iglesia el espíritu
de piedad y fortaleza,
que suscite dignos ministros de tu altar
y los haga testigos valientes de tu Evangelio.
Te lo pedimos por Jesucristo
que vive contigo y el Espíritu Santo. Amén