lunes, 19 de octubre de 2009

Danos, Señor, un corazón fuerte

Danos, Señor, un corazón fuerte
que te ame con sinceridad,
con ardor, con sacrificio;
que te sea fiel a cada hora.
Un corazón que convierta
cada obstáculo en estímulo
para amarte en mayor medida;
cada falta, en contrición;
cada dolor, en ofrenda;
cada acción, en amor;
cada gracia, en gozo.
¡Oh Dios Padre,
oh Dios Hijo,
oh Dios Espíritu Santo!
Amén.
(Cardenal Montini -Pablo VI-)

No hay comentarios:

Publicar un comentario