viernes, 15 de enero de 2010

Te bendigo, Señor


Pastor, te bendigo por lo que me das.
Si nada me das, también te bendigo.
Te sigo riendo si entre rosas vas.


Si vas entre cardos y zarzas, te sigo.
¡Contigo en lo menos, contigo en lo más,
y siempre contigo!


Tobit 4, 14-15a. 16ab. 19
Ten cuidado, hijo, en todo lo que haces y pórtate siempre con educación. No hagas a otro lo que a ti no te agrada. Da tu pan al hambriento y tu ropa al desnudo. Da de limosna cuanto te sobre. Bendice al Señor en todo momento, y pídele que allane tus caminos y que te de éxito en tus empresas y proyectos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario